Nuestra demografía horrorosa está en la base de la mayoría de los problemas ecológicos de nuestro planeta, particularmente en cuanto a la extinción de las especies de grandes animales. No salvaremos el tigre en una gente de 9 mil millones de hombres. Es materialmente imposible. el tigre y todos grandes depredadores necesitan espacios vastos y es aquel de lo que privamos. Todas las medidas de protección medioambiental no servirán para nada (no servirán un poco, insite bien, no servirán para NADA) si no reducimos nuestra presencia sobre el planeta por una natalidad más modesta. [] comprometiéndose en esta vía podríamos salvar el tigre, el equilibrio ecológico general y también salvarnos nosotros mismos. Debemos aprender a compartir el mundo, la falta
